¡Ahora…hablan los políticos que tienen miedo!

En especial los temerosos de los resultados reales que puedan obtener en las elecciones del 2021 buscan cualquier forma para eliminar a sus contendores, ya sea interponiendo recursos de apelación, impugnando, por medio de trolls, y todas las argucias que se han inventado para así buscar la manera de ganar “sus elecciones” por cuanto se creen los únicos que deben y pueden ser electos en este país.

Lo cierto es que aquellos que se han dedicado a estas patrañas son los que realmente no están seguros de poder ganar, y por ello tratan de allanar su camino hacia la presidencia y lo único que están logrando es perder adeptos a su propia campaña. Para afianzar lo expuesto vamos analizando la ya llamada candidatura chimba de Álvaro Novoa, que por cierto es válida desde cualquier punto de vista que se lo analice, pero refiriéndonos al punto, supongamos que el CNT acepta la impugnación, los que todos saben se verán afectados por cuanto la ciudadanía sabe que lo hicieron por miedo y por saber que es una candidatura fuerte como la de ellos, sino es aún más fuerte que la que ellos tienen. Por otro lado si no se acepta la impugnación, a más de la reacción ciudadana contra los que pusieron la acción, van a fortalecer la campaña de sus adversarios con propaganda indirecta gracias a los equivocados argumentos interpuestos.

Lo cierto es que cada vez es más insegura la realidad de cara a las siguientes elecciones ya que hay para escoger entre una serie de opciones, todas ellas sin concepto y precepto real que no sea sus propios intereses personalistas y su ego de decirse a sí mismos que algún día fueron candidatos presidenciales. Pocos son los candidatos que realmente tienen bien estructurada su campaña y refleja conocimiento sobre el país y sus necesidades, la mayoría son meras especulaciones idílicas de lo que ellos dicen saber para salvar al país de este debacle en el que nos hallamos.

Si ya están más de 15 candidaturas, pues que vengan las que sean, a final de cuentas solo dos lucharan la ronda final, esto es, la segunda vuelta para ver quién mismo es el “ungido” para seguir en la telenovela ecuatoriana “Los presagios de un desastre”. Lo que sí se puede adelantar es que uno de esos binomios ya está en la recta final y espera a su contendor de entre muchos otros que por su esencia misma, son de los grupos que creen en el individualismo y sectarismo económico como base del fundamento social.