Una nueva masacre se registró la noche de este viernes 12 de noviembre en la Penitenciaría del Litoral que deja -al momento- 58 personas privadas de la libertad fallecidas y 12 heridas, según lo dieron a conocer el gobernador del Guayas, Pablo Arosemena Marriott, y la comandante de la Policía Tannya Varela.
Arosemena Marriot a nombre del Gobierno lamentó el deceso de los presos y dijo que este incidente que se dio a las 19:00 es producto de las luchas por el narcotráfico y que a pesar del riesgo que corrían los policías se decidió que ingresaran al recinto que carecía de energía eléctrica.
La balacera registrada en el pabellón 2 de la Penitenciaría fue tomada al parecer con calma por parte de las autoridades, quienes recién se pronunciaron sobre lo ocurrido, cuando los reclamos en las redes sociales y el pedido de ayuda de los propios presos no fueron atendidos de inmediato por el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores del Ecuador (SNAI), cuyo representante tampoco estuvo presente en la rueda de prensa convocada para explicar lo ocurrido.
Todo esto se da a pesar de que hay un estado de excepción en las cárceles del país y esta semana se creó una comisión técnica de emergencia para enfrentar la crisis carcelaria que contabilizaba 265 muertes violentas a escala nacional y solo en la Penitenciaría más de 180 casos, a los que ahora se sumarán estos nuevos fallecidos con lo que las estadísticas llegarían a 323, ante las disputas que mantienen las organizaciones delictivas por tener el control tanto al interior, como afuera del recinto.
Trascendió que se halló un fusil, armas cortopunzantes y explosivos durante el operativo policial.
La comandante de la Policía indicó que son 700 policías que están a cargo de la Penitenciaría, de los cuales 400 uniformados controlan exclusivamente el pabellón 2 que fue atacado por los internos del 3, ya que se quedó sin su cabecilla porque fue puesto en libertad.
Solo del pabellón 2 serían 10 muertos y en la zona de Transitoria se habría dado la mayor masacre por parte de los internos de los pabellones 7, 8 y 9.
Los privados de la libertad quemaron colchones e hicieron huecos en las paredes del pabellón 2, con la finalidad de que los internos salgan a causa del humo para ser asesinados.
Al momento, la Policía se encuentra en el interior de la Penitenciaría, mientras los militares en los exteriores y personal de otras instituciones del Estado brindan información a los familiares de los fallecidos en la Policía Judicial.