Portugal intentará en marzo para clasificarse para el Mundial porque no supo defender el 1-0 logrado por Renato Sanches en el minuto 2. Los de Fernando Santos mostraron una debilidad impropia de una plantilla así, siendo débiles en defensa y fallones en ataque. Serbia, por su parte, se repuso del tempranero error de Gudelj para remontar el partidazo que vivió Da Luz.
A Fernando Santos, que no podía contar con Pepe por sanción (recurrió a Fonte), sabía que un empate le servía para clasificarse, pero durante la semana se cansó de repetir que no contemplaba salir a especular con el resultado. Esta mentalidad ganadora se demostró a los dos minutos de juego, cuando Bernardo Silva estuvo más listo que Gudelj, que se durmió en salida de balón, y robó para asistir a Renato Sanches. Sin embargo, a partir de entonces solo hicieron méritos para perder el partido.
Los dos protagonistas del gol fueron los más activos del ataque. Mientras Jota dejaba destellos, Cristiano Ronaldo se desesperaba cuando, sobre todo el autor del gol, prefería terminar la jugada y no buscarle a él.
A la media hora de partido, Tadic, tras un aviso de Vlahovic, volvió a igualar el partido con un disparo desde fuera del área que desvió Danilo despistando, así, a Rui Patrício, que cumplía su partido 100 con la selección. Serbia despertaba y Portugal no encontraba la manera de volver a ampliar su ventaja.
Portugal siguió llevando el peso del partido, pero las ocasiones en los últimos minutos eran de Serbia. Cada balón colgado dejaba sin respiración a Lisboa y fue un centro de Tadic, imparable en todo el partido, el que dejó solo a Mitrovic en un error de marca propio de benjamines para que hiciese el 1-2. La expedición de Stojkovic saltó al césped a celebrarlo y lo repetiría tres minutos más tarde, cuando Orsato pitaba el final y Cristiano, mirando al horizonte, negaba con la cabeza.